Autor: Eli Suli
Como resultado de la ocupación nazi de Polonia, los judíos primero fueron confinados en guetos y luego deportados a los campos de concentración. En octubre de 1942, el Rebe de Bluzhov fue trasladado al campo de concentración de Belzec, de donde logro escapar. Sin embargo, posteriormente fue capturado nuevamente y trasladado a Bergen- Belsen, donde toda su familia fue asesinada, pero él sobrevivió.
Faltaban solo dos días para Pesaj, aún en Bergen- Belsen, el Rebe preguntó a los que estaban junto a el: “En unos días más será Pesaj, ¿qué vamos a hacer con las Matzot?”. ¿Pero Rabino, de que Matzot usted está hablando? le contestaron sus compañeros, ojalá que por lo menos tengamos para comer una pequeña
ración de pan Jametz… Sin embargo, él Rebe propuso pedir harina al comandante nazi, y explicarle que ellos no podían comer pan en esos dias, y necesitaban que sus raciones se las dieran en harina para hornear sus Matzot. ¡Rabino, eso es imposible, usted no sabe con quién está hablando, esa idea es una locura!
Sin embargo, el Rebe, con el consentimiento de los prisioneros, fue a hablar con el general nazi, quien sorprendentemente aceptó enviar la solicitud a las oficinas en Berlín. Al día siguiente, inesperadamente llego el permiso, justo un día antes de Pesaj. El comandante nazi entonces les dijo: “Ustedes recibirían harina en lugar de pan”. Con sus últimas fuerzas, los prisioneros improvisaron un horno, y bajo la dirección del Rebe comenzaron a preparar las Matzot. Pero, mientras las horneaban, un miembro de la Gestapo entró repentinamente y preguntó: “¿quién es el responsable de estas Matzot? Cuando supo que había sido el Rabino, lo golpeó brutalmente hasta dejarlo inconsciente.